26 octubre 2009

El autoexamen: ¡Quiérete, cuídate, tócate!

foto: E.A. Rudas

A pesar de que hay mucha mayor información sobre el cáncer de mama y muchas personas comprenden la importancia de cuidarse y prevenir los riesgos sobre esta enfermedad, apenas 20% de las mujeres se realizan el auto-examen de los senos. Tal vez esta cifra podría elevarse si las mujeres comprenderíamos que esta acción, que no toma más de 5 minutos al mes, podría llegar a salvarnos la vida.

Debemos examinar nuestros senos una vez al mes, así esta práctica llegará a convertirse en un hábito. Si bien los médicos recomiendan que empecemos alrededor de los 20 años, nunca es demasiado tarde y el momento ideal para hacerlo por primera vez es ¡ahora!

Pero para empezar nosotras mismas e incentivar que las mujeres de nuestro entorno lo hagan, debemos saber exactamente en qué consiste el autoexamen y cómo debemos realizarlo. A través de unas simples inspecciones y palpaciones comenzaremos a conocer la estructura normal de nuestros senos y estaremos capacitadas para descubrir cualquier anomalía futura que pudiera aparecer.

¿Cuándo es la fecha más adecuada para realizarnos el autoexamen?
A los siete días después del inicio de nuestro periodo menstrual. Durante el período pre-menstrual los senos suelen estar endurecidos y podemos tener sensación de dolor, debido al estímulo hormonal. Por eso, lo ideal es esperar una semana porque así nos aseguramos que el examen se realice con el estado ideal de las mamas y no cuando estos estén sensibles o inflamados. Si estás embarazada o durante la época de menopausia, lo ideal es que sea un día fijo del mes. De esta manera crearemos el hábito y será más fácil recordarlo. Este autoexamen te permitirá reconocer nódulos o tumoraciones que podrían ser cancerosos. Recuerda que un tratamiento oportuno puede salvar tu vida. Antes de realizar esta evaluación personal, consulta con tu médico ginecólogo para que te informe sobre la forma correcta de hacerlo.


¿Cómo realizo el auto examen?

La Inspección
Párate frente a un espejo y observa tus senos, primero con los brazos colgando libremente a los costados, luego elevándolos por encima de la cabeza y finalmente con las manos presionando la cintura (esta maniobra contrae el músculo pectoral).
Observa tus senos para detectar diferencias entre una y otra mama, alteraciones en el tamaño o en la forma, fíjate con cuidado en el contorno de cada seno (bultos, durezas, retracciones del pezón). También observa la piel para ver si presenta alguna coloración rojiza peculiar, alguna ulceración, etc. Si existe alguna alteración en la mama, modificación en la piel, o en los pezones lo recomendable es que acudas a tu médico para que te examine mejor.

Palpación A
Debes realizarla acostada porque en esta posición los músculos están relajados y se facilita la palpación. Si vas a examinar la mama derecha primero, debes colocar una pequeña almohada bajo el hombro derecho, a su vez el brazo de este lado debes elevarlo y situarlo detrás de la cabeza a nivel de la nuca (como la posición de la imagen).
Después, con los tres dedos centrales de la mano izquierda realiza movimientos concéntricos o espirales alrededor de la mama, presionando suave pero firmemente con las yemas de los dedos y efectuando movimientos circulares en cada punto palpado, desde la periferia de la mama hasta el pezón, y en el sentido de las agujas del reloj.













Palpación B
El segundo paso es realizar al anterior pero con movimientos verticales. Para ello desplaza la mano para arriba y para abajo, cubriendo toda la mama. Después, realiza los movimientos de cuadrantes, en los cuales la mano se desplaza desde el pezón, a la periferia de la mama y se regresa, hasta cubrir todo el seno.









Palpación C
En la misma posición debes palpar la axila correspondiente a la mama que estás explorando, para descartar la aparición de bultos; para ello, desplaza la mano a lo largo de toda la axila realizando movimientos circulares de la mano en cada posición, la presión que haz de ejercer con los dedos debe ser levemente mayor que en el caso anterior.








Palpación D
Finalmente, debes realizar la palpación de la aureola y el pezón, presionando el pezón entre los dedos pulgar e índice. Observa si al presionar existe algún tipo de secreción. También levanta el pezón junto a la aureola para comprobar si existe buena movilidad o adherencia.












Esta actividad debes realizarla por lo menos una vez al mes. Si encuentras algún cambio en tu cuerpo, un pequeño bulto o un cambio en la forma de tus senos anda inmediatamente al médico para que te realice un examen más exhaustivo. Las dejamos con este video, que grafica lo que hemos explicado en este post. Recuerda siempre: ¡Quiérete, cuídate, tócate!




fuentes:

14 octubre 2009

Seamos parte de la lucha contra el cáncer de mama


Octubre es el mes del cáncer de mama, y queremos aprovechar en compartir algunas cifras que nos ayuden a darnos cuenta de las reales dimensiones de esta enfermedad:

3,500 limeñas son diagnosticadas con cáncer de mama anualmente. Se trata de una enfermedad que no discrimina y puede presentarse en cualquier persona. Por eso, es importante no olvidar nuestros chequeos anuales y estar atentas a los cambios en nuestro cuerpo. La detección temprana siempre será nuestra mejor aliada.
Más del 70% de mujeres con diagnóstico de cáncer de mama en etapa temprana logran superar la enfermedad. Nunca será suficiente repetirlo: la clave es la prevención y la detección a tiempo. Si detectamos algún cambio o un pequeño bulto en nuestros senos, no esperemos que pase mucho para acudir al médico. El tiempo es un factor clave, y solo depende de nosotras. Tengamos presente que, de los 3,500 nuevos casos detectados cada año en Lima, alrededor del 40% son diagnosticados en etapas avanzadas.
El cáncer es actualmente la segunda causa de muerte en el Perú, y en el caso de las mujeres, el cáncer de mama es la neoplasia más frecuente. Se estima que, en el país, mueren en promedio 3.85 de cada 100,000 mujeres al año debido a esta enfermedad, y en el mundo son alrededor de 6.3 mujeres de cada 100,000.
35 años es la edad promedio en la que se desarrolla el cáncer de mama. Por encima de esa edad comienzan a presentarse los signos. Se ha comprobado que mujeres que dieron a luz antes de los 20 años es raro que desarrollen cáncer de mama. De acuerdo al Centro de Ginecología Preventiva OncoGyn, sólo dos de cada 10 mujeres en edad reproductiva (de 15 a 49 años) se realiza un chequeo ginecológico de forma preventiva con el objetivo de evitar infecciones, enfermedades degenerativas e inclusive el cáncer.
La vida de una mujer puede depender de una actividad que le toma 5 minutos al mes: el autoexamen. Nunca debemos dejar de repetirnos a nosotras mismas y a todas las mujeres que conozcamos: tócate. Esa es la única manera de poder detectar cambios en nuestros senos. Si el tumor se detecta cuando el tamaño alcanza máximo los 2 cm, las probabilidades de curarlo completamente es del 95%. 2 años y medio se demora en desarrollar un tumor palpable de 2 a 5 centímetros. Piense que, al realizar los chequeos, se puede descubrirlo más que a tiempo.
8,4 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de mama tienen las mujeres que no tienen hijos. 7 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de mama tienen las que dan a luz por encima de los 30 años. Cuando el cáncer es descubierto durante la gestación, las probabilidades de vida de la paciente es menor.
En comparación con otros países de América Latina, el Perú ocupa el quinto lugar en incidencia de cáncer de mama. Tal es el avance del cáncer en nuestro planeta que, en diciembre del año pasado, expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señalaron que, para el año 2010, éste se convertirá en la primera causa de muerte en el mundo, y que superará a las enfermedades del corazón. Los especialistas señalan que esta situación se dará debido al aumento del tabaquismo (especialmente en los países desarrollados), que causará estragos en una población mundial cada vez más sedentaria.
Se estima que aproximadamente el 30% de las muertes por cánceres no detectados, son debidas a la diseminación de éste: metástasis. El cáncer de mama es una de las principales causas de muerte de mujeres a nivel mundial: hoy es la segunda causa de muerte por cáncer en la mujer y la primera en una franja de edad comprendida entre los 40 y 44 años. En España, cada año se diagnostican 16,000 nuevos casos de cáncer de mama y la experiencia ha demostrado que la detección precoz de este tumor, principal causa de mortalidad entre las mujeres, es la mejor arma en la supervivencia.
Se calcula que cada hora casi cinco peruanos son diagnosticados con cáncer. Y asegura que, tres de esos casos pudieron haberse prevenido o detectado a tiempo. Lamentablemente, solo el 15% de los casos se detecta en su etapa inicial.
En el país, un tercio de los miles de casos tratados por cáncer está relacionado al alcohol y al tabaco. Asimismo, detalló que la mayoría de los casos no presenta síntomas hasta que la enfermedad ya está avanzada. En el caso de las mujeres, el consumo reiterado de alcohol incrementa la actividad metabólica del tejido mamario, promoviendo la oxidación celular, un factor clave en la generación de tumores y, en particular, de cáncer de mama.

Prevención, exámenes médicos anuales, un estilo de vida más sano, menos alcohol y tabaco y más actividad física… son algunas cosas simples, pero de gran ayuda en la lucha contra el cáncer.

Fuentes: Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN); Liga Peruana de Lucha contra el Cáncer; Organización Mundial de la Salud (OMS).